El fundamento del Derecho
En nuestra época se tiene una concepción del Derecho positivista, es decir, que el fundamento del Derecho radica esencialmente en la ley que emana del Estado.
El Derecho Positivista se fundamente en la ley que emana del Estado y cuya cumbre del ordenamiento jurídico positivo es la Constitución.
Opuesta a esta concepción una concepción iusnaturalista, que fundamenta todo el ordenamiento legal y constitucional en la esencia del ser humano. El iusnaturalismo parte del reconocimiento de los derechos que emanan del ser humano independientemente de si estos derechos han sido reconocidos o no, son derechos preexistentes al orden legal y al mismo Estado.
Aparentemente parecerá ocioso discutir sobre el fundamento del Derecho, pero en nuestra época resulta de gran trascendencia discernir este problema porque dependiendo de la postura que se adopte, resultará el camino que se tome en la solución de diversos dilemas que en la ciencia del derecho se están suscitando.
Tomar como fundamento la esencia de la realidad, especialmente de la realidad humana, preserva al Derecho de las ideologías, que se caracterizan principalmente por no tener fundamento o más bien se fundamentan sobre sí mismas, incurriendo en fundamentalismos. El derecho natural respeta el principio lógico de partir de lo más evidente, de las primeros principios y de las últimas causas, que en nuestra ciencia lo más evidente siempre serán los valores que emanan de la esencia del ser humano, que en el Derecho es la Justicia.
A grandes rasgos este es el problema sobre el fundamento del Derecho, y la tradición del derecho natural, es la que mejor resuelve los problemas jurídicos que se han estado suscitando con el surgimiento de las diversas ideologías de nuestro tiempo, ya que preserva ante todo al ser humano como un fin en sí mismo.